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Reduciendo la huella de carbono con sistemas radiantes

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03.12.2019

Los techos y suelos radiantes permiten reducir nuestro consumo energético de manera considerable.

La huella de carbono y su reducción es uno de los conceptos que se está empezando a implementar en nuestra sociedad; un tema central en COP25, la Cumbre por el Cambio Climático de la ONU que se celebra estos días en Madrid.

Este término ha empezado a acuñarse recientemente para referirse a todas las emisiones de carbono causadas directa o indirectamente por una actividad. Reducir esta huella en nuestro día a día es el objetivo principal para poder paliar la emergencia climática actual. Y esto incluye minimizar la producción de carbono en la climatización de hogares, puestos comerciales, industriales y edificios públicos.

Sistema radiante: ahorro energético y reducción de la huella de carbono

El uso de sistemas radiantes es una de las soluciones para ello, una climatización que exige una menor temperatura de trabajo en los equipos de producción a fin de alcanzar la temperatura de confort deseada.

Esto significa que el consumo que realiza el equipo de producción es menor, reduciendo la contaminación. Gracias a la capacidad de los sistemas radiantes tanto para generar calor como frío, este menor consumo se sostiene durante todo el año.

Además, el sistema radiante puede ser adaptado a muchos tipos de equipos de producción: calderas de condensación, aerotermia, geotermia, biomasa y energía solar.


Esquema de la instalación de diferentes soluciones de suelo radiante.

Giacomini Powerbox: gestión y producción autónoma de la energía

Precisamente, esta compatibilidad con placas solares permite crear una climatización autónoma y de emisiones cero si dispone de una caja de alimentación Powerbox. Se trata de un generador de energía que permite tener climatización sin depender de redes eléctricas externas.

En un edificio equipado con placas solares, la energía solar se acumula en la Powerbox en forma de hidrógeno, permitiendo su almacenamiento para un consumo posterior. Gracias a la caldera catalítica que existe dentro de la Powerbox, el hidrógeno almacenado se convierte de nuevo en electricidad que alimenta el sistema radiante o en calor para alimentar el sistema radiante, dejando únicamente como residuo agua pura, sin producir ninguna huella de carbono ni contaminación alguna al medio ambiente.

Esta apuesta por la gestión autónoma que ha realizado el Grupo Giacomini supone el futuro inmediato de la climatización en hogares y actualmente ya está en funcionamiento en proyectos como la ‘Casa de la Innovación’ en Holanda.


Esquema del sistema Powerbox cuando alimenta la climatización y el ACS de un hogar.