10/09/2021
Confort ambiental y acústico además de bajo consumo y mantenimiento. Una solución muy ideal en hostelería.
Traducción de la entrevista original del magazine Ingenio a Roberto Torreggiani, Director Técnico de Giacomini Group.
Los techos radiantes de pladur son una elección ideal cuando se busca un sistema de climatización eficiente que optimice los costes de instalación y mantenimiento a la par que minimiza el consumo energético.
A ello se suma también que es una solución que aporta confort termo-higrométrico (temperatura ambiental y humedad) y confort acústico. Por esto, se trata de uno de los sistemas más usados en hostelería, especialmente en hoteles.
Sistemas radiantes: gama GKC de Giacomini
En un hotel, el confort termohigrométrico es fundamental. El sistema debe asegurar la temperatura adecuada en cada estación, mantener la humedad bajo control y minimizar tanto el movimiento del aire como la circulación del polvo, precisamente para evitar molestias a los ocupantes. Además, es necesario que el sistema sea silencioso en su funcionamiento y sobre todo pueda ofrecer, cuando se requiera, también soluciones para la reducción del ruido. La solución de techo radiante, especialmente el de cartón-yeso, es ideal para satisfacer todas estas necesidades, de hecho, se trata de paneles fácilmente adaptables y personalizables según los requerimientos arquitectónicos de este tipo de estructuras.
Entre los sistemas radiantes, es con diferencia el más versátil, de hecho, su modularidad se adapta a las diferentes superficies presentes en un hotel y sobre todo tiene un rendimiento óptimo en refrigeración y calefacción. La gama GKC de Giacomini incluye los sistemas Classic y Super Classic, este último con un rendimiento aumentado en un 20 dc por ciento en comparación con otros productos de la categoría y le permite cubrir las cargas de verano de manera óptima. En cuanto al confort acústico, Giacomini ha desarrollado versiones ad hoc para la reducción de ruidos. Además, también ofrecemos tipos de paneles con espacios vacíos diseñados para insertar otros sistemas, como iluminación o sensores antiincendios. Finalmente, para zonas con alta humedad, como baños, hemos desarrollado paneles especiales con superficie hidrófuga.
Las ventajas del techo radiante
Por supuesto, el panel diseñado para el techo también se puede montar con un marco específico en las paredes como una integración en entornos particularmente dispersos. En comparación con el sistema de suelo, la ventaja del falso techo es el rendimiento de refrigeración netamente superior. La baja inercia del sistema también lo hace perfecto incluso en casos en los que el funcionamiento es discontinuo. La facilidad de instalación es fundamental en las obras hotelera.
En general, el sistema de techo radiante está muy cerca del comportamiento de un suelo de bajo espesor y baja inercia térmica, pero el rendimiento de refrigeración es casi el doble. Dado que generalmente las habitaciones de un hotel no están ocupadas continuamente por los clientes, para ahorrar energía es necesario reducir o reactivar el conjunto de manera rápida. Para ello, necesita una solución que sea capaz de reaccionar rápidamente a la modulación y la regulación de la temperatura. En este punto, el panel de yeso es el producto óptimo.
Aislamiento acústico en una única solución
Giacomini ha diseñado y desarrollado modelos específicos que cuentan con propiedades acústicas aumentadas capaces de atenuar las vibraciones mecánicas, evitando las reverberaciones y los ambientes insonorizados, limitando la transmisión del sonido de una habitación a otra. Para hacer una contribución al aislamiento acústico, generalmente es necesario recurrir a la instalación de accesorios o capas adicionales. En este caso, en cambio, tenemos versiones del techo radiante que ya integran soluciones técnicas útiles para reducir el ruido.
En el sector hotelero es importante poder reducir al máximo los costes de mantenimiento; por ejemplo: son realmente elevados en el caso de los sistemas de aire tradicionales como los fan coils. En cambio, con sistemas con techos radiantes, el movimiento de aire es mínimo, por lo que el mantenimiento y gestión de la filtración también se reduce al mínimo y esto es relevante para la economía de un hotel con muchas habitaciones y espacios diferentes. Hablamos también de sistemas que, además de poder combinarse con calderas, se combinan perfectamente con bombas de calor y, al funcionar a bajas temperaturas, aumentan su coeficiente de rendimiento.